Anna, una atractiva violinista, vive provisionalmente con su novio Walter en el apartamento de su exmarido. Cuando éste descubre la situación, la pareja se ve obligada a buscar otra vivienda. Un amigo de Walter, que es agente de la propiedad, le proporciona una auténtica “ganga” en las afueras de la ciudad. 

La pareja protagonista debe mudarse ipso facto, pero no tienen dinero. Él es un abogado que pertenece a un mundo donde la gente está acostumbrada a estafarse entre ella, todos forman parte de un grupo que tiende a realizar actos ilícitos, incluso en contra de sus propios amigos, con tal de hacerse ricos. Un amigo de Tom Hanks le ofrece un auténtico chollo, una preciosa casa en las afueras que, a simple vista, es grande y elegante, pero después de comprarla descubrirán que la casa se cae a pedazos.

Por un lado tenemos toda la subtrama romántica que rodea a los dos protagonistas, y en la que también interviene el exmarido de ella. La película trata temas como los lazos conyugales o la confianza en pareja. Realmente es la parte de la obra que menos me interesa, ya que realiza un retrato muy superficial de las relaciones de pareja, marcando cierta analogía con la casa. "Si la casa tiene buenos cimientos, cualquier problema se puede arreglar". Toda la subtrama amorosa resulta acorde con la trama principal que envuelve la casa, pero pierde un poco de fuerza después de la supuesta infidelidad.

El punto fuerte de la obra es sin duda todo lo que sucede en relación a la ruinosa casa que han comprado. Es una película donde el humor funciona muy bien, reside principalmente en los propios actores, ya sea a través de sus gestos, como Tom Hanks, o de su propia personalidad y aspecto, como el exmarido. Por otro lado es un humor muy físico, tiene gags que recuerdan a Buster Keaton, con secuencias donde nuestro protagonista sufre las consecuencias de vivir en una casa que se cae a pedazos. Sin duda mi favorita es la secuencia de la cocina, cuando el cableado comienza a prender fuego, es una secuencia rodada de forma maravillosa, toda la película en general tiene unos efectos prácticos muy artesanales que resultan magníficos.

No es una película con un guión Shakespeariano, es una comedia familiar con un encanto inmenso, con una pareja de actores maravillosa y con unos gags tremendos. Una obra producida por Spielberg, con un humor que recuerda a aquel cine mudo, y con un Tom Hanks histriónico perdido. Es un modelo de cine familiar que cada vez se está perdiendo más y más, sobre todo en cuanto a calidad. Un 6'8.