Un hombre (Sergi López) y su hijo (Bruno Núñez) llegan a una rave perdida en medio de las montañas del sur de Marruecos. Buscan a Mar, su hija y hermana, desaparecida hace meses en una de esas fiestas sin amanecer. Reparten su foto una y otra vez rodeados de música electrónica y un tipo de libertad que desconocen. Conocen a un grupo de raveros y deciden seguirlos a una última fiesta que se celebrará en el desierto, donde esperan encontrar a la joven desaparecida.

Sirat comienza con una rave en medio del desierto, una escena muy potente donde parece una especie de fiesta en el infierno, con los diablillos bailando. Música a tope, altavoces enormes, polvo, drogas... la escena que abre la película es una auténtica locura.

Y una de las cosas donde más destaca la obra, es en el uso del sonido, ya no sólo la música, sino el sonido. Es una obra que no sólo entra por los ojos, sino también por los oídos. Un sonido que, acompañado de las imágenes, crea una inquietud en el espectador increíble. Se crea una atmósfera pesada, densa y de inseguridad constante. Eso sumado a su estilo lento y pausado, que incrementa esta sensación de densidad, da lugar a un ambiente tórrido y tenso.

Por otro lado el desierto en sí, es un personaje más. Oliver Laxe siempre ancla sus obras a zonas concretas, para que estas formen parte de la narrativa y tengan un peso estético y dramático.

Hay una momento donde la obra se parte por completo, y sin entrar en spoilers, porque es un momento impresionante, digamos que la obra coge un tono onírico y solipsista, rozando casi lo abstracto, lo que era un viaje físico, ahora es psicológico.

La obra tiene cierta crítica social, pero tampoco la desarrolla mucho. Sobre todo se centra en ese viaje al más puro estilo de 'Centauros del desierto', donde los protagonistas deben encontrar a alguien perdido y, por ende, deberán atravesar el desierto y lidiar con sus peligros. Es casi una película de aventuras donde el terror, la tensión y el dramatismo, se ha adueñado de ella. Es una película hipnótica, y si podéis verla en el cine mucho mejor, el sonido es una experiencia increíble. Un 7'9.